TRATAN EL ABUSO DE ALCOHOL EN LAS ESCUELAS

Cynthia Palacios publicó en LA NACION este artículo que creemos interesante transcribir:
Unos 200 alumnos presentaron las acciones de un programa escolar que busca desalentar el consumo excesivo entre los jóvenes

Los lunes llegan alcoholizados y los jueves salen rápido para arrancar desde temprano con la "previa". La escuela se dio cuenta de que tenía que intervenir: el abuso de alcohol es un tema del que se habla en las aulas.
Se trata de una realidad preocupante, que afecta al 63% de los estudiantes (según datos del Instituto Germani), que se inician en el consumo a los 13 años, sin diferencias entre varones y mujeres.
Ayer se realizó el cierre de la edición 2008 del programa Manejá lo que Tomás, una iniciativa de la asociación Las Otras Voces y la Federación de la Industria Licorista Argentina. El encuentro contó con la participación de más de 200 estudiantes secundarios y de medio centenar de profesores de escuelas de esta ciudad, La Plata, Quilmes, Villa Dominico, Moreno y Paraná, una parte de los 1200 que trabajaron durante el año en el proyecto. Según los impulsores, el impacto de estos talleres, sin embargo, alcanza a más de 13.000 chicos.
La campaña procura dar a los chicos la palabra, para hablar de sus problemas, para pensar juntos cómo salir de ellos. La entidad tiene como misión promover el derecho a la comunicación, desde la infancia, como herramienta hacia el ejercicio y la defensa de los derechos humanos.
A lo largo del año, alumnos, padres y profesores trabajaron en talleres y elaboraron mensajes sobre qué les pasaba frente al consumo de alcohol. Ayer, en el Galpón de la Reforma, los jóvenes dialogaron con el doctor Raúl Zaffaroni, ministro de la Corte Suprema de Justicia, y expusieron sus producciones mediáticas: afiches, pasacalles, páginas web, mensajes de texto, promociones radiales, videos y hasta una obra de teatro.
La "previa"
"Apuntamos a desentrañar ese fenómeno cultural que es la «previa» a la salida", contó la presidenta de la organización, Mónica Beltrán. Sorprendidos, se dieron cuenta de que, al ser consultados, la mayoría de los chicos no sabe por qué toma.
"El alcohol los desinhibe, pero, en el fondo, todo se vincula con un proyecto de vida. Los chicos quieren relacionarse entre sí, y acá es fundamental el rol de los adultos. Primero, poniéndoles límites y después, dándoles alguna alternativa creativa", consideró Beltrán.
"Como espacio de socialización, la escuela se ocupa de todo. Es el lugar donde los chicos pasan gran parte de su tiempo y sigue teniendo un gran potencial formador", explicó la coordinadora del proyecto, Marina Joski.
El trabajo en las escuelas les permitió ver algunas constantes que preocupan: los chicos asocian el alcohol a la diversión y a la violencia, y consideran que es un igualador ante la diversidad. "Les es imposible visualizar el límite. Todo tiene que ver con una figura adulta ausente y desautorizada", agregó Joski.
Desde la asociación habían visto que en la escuela se hablaba de consumo y de alcoholismo, pero no se trabajaba en el desarrollo de un concepto de consumo responsable. Los maestros veían que no podían enfrentar solos el problema. El cuadro era alarmante: el 95% de los chicos que consumen alcohol lo hacen perdiendo el control de sus actos, según un estudio de 2007 del Observatorio Argentino de Drogas y el Instituto Gino Germani.
"Sabiendo cuál es el mensaje que les llega, la idea es lanzar una campaña masiva", adelantó Beltrán. Pusieron en palabras el problema y confían en que así será más fácil hacerle frente.
1200 Chicos, profesores y padres
Participaron de la edición 2008 del programa. Sin embargo, creen que el impacto llega a 13.000 jóvenes.
95% Pierde el control
La mayoría consume hasta perder el dominio de sus actos.
73% De los varones
Cada vez que consumen, toman tres vasos seguidos de alcohol. Lo mismo hace el 54% de las mujeres.
13 Es la edad de inicio
En promedio, hombres y mujeres empiezan a beber a esa edad. El consumo crece con los años.

La droga y la delincuencia

Según fuentes oficiales, los menores que delinquen consumen "paco" y una droga que ellos denominan "aceto", especie de cocaína rebajada que compran a 14 pesos. Para entrar en las casas, como lo hicieron en la del ingeniero Barrenechea, utilizaron tarjetas de plástico fabricadas con envases de gaseosas, y automóviles que alquilan por 500 pesos.
Todos tienen tantas entradas en la policía como salidas.
La mayoría son segunda o tercera generación de delincuentes.
Es decir, sus padres y sus parientes más cercanos son o fueron delincuentes, están presos o muertos a edades tempranas antes, durante o con posterioridad a un hecho delictivo.
A su vez, ellos se convierten n padres a edades donde tendrían que estar con una pelota jugando en una canchita para divertirse después de estudiar y pensar en una profesión u oficio. A cambio de eso "trabajan" de ladrones y asesinos por monedas. Ni siquiera hay un proyecto de éxito atras de un atraco. Distan mucho de los ladrones perfectos de las películas de Hollywood con traje y corbata o vidas espectaculares.
Si el crimen y el robo lo tomaran como algo "profesional" (
antes un delicuente casi se profesionalizaba y hasta había una ética dentro de la delincuencia) no necesitarían excitarse o nublar sus cabezas con drogas varias. Es más ¿qué persona con deseos de realizar una tarea exitosa se drogaría para hacerla?. Solo alguien con una muy baja autoestima, con una falta total de afecto y sin proyecto firme por delante.
Roban por robar. Matan por matar. No tienen norte ni futuro. No les importa nada, porque no tienen vida ni proyecto de vida y no creen que otros merezcan tenerlo. Son seres perdidos antes de empezar a crecer porque su origen ha sido el peor que se puede elegir para un ser humano.
Lo más grave es que ellos siguen generando vida con el mismo destino y con los mismos vicios y con los mismos problemas que irán en aumento porque al poder le sirve más este especie de entes que personas pensantes. Nada le gusta más a la mafia del narcotráfico que este grupo de personas sin rumbo. Entretanto, los ciudadanos hacemos lo que podemos con marchas y contramarchas, con jueces que parecen no tener el más mínimo sentido común y con dirigentes negadores y fuera de contexto y sin proyectos de contención mínima.
Una vez, alguien me dijo que los grupos marginales tienen hijos porque es lo único propio que pueden tener y aunque suena horrible... parece real.
La droga seguirá creciendo.
La delincuencia también.
Mientras tanto se discute si bajar o no la edad de imputabilidad y se discute si darle o no anticonceptivos o permitirles el aborto.
Lástima que solo lo vemos los que vivimos una vida común.
Lástima que los políticos tienen tanta seguridad alrededor. Además, algunos seguro que se drogan para soportar la culpa que les debe dar ser tan ladrones y asesinos como esos chicos, pero eso sí, lo disimulan lindo ¿verdad?

INFORMAMOS

Lamentablemente, un virus de los que andan por la web y son resistentes a los antivirus nos perjudicó seriamente el día domingo ppdo.
Hemos perdido los archivos de clientes y participantes que teníamos clasificados y ordenados por diferentes parámetros: por ejemplo, miembros de grupos que participaron en talleres, alumnos de cursos, participantes de coaching, personas con adicciones que realizaban coaching, entre otros.
Los emails en listados alfabéticos estaban con su back up al igual que nuestros cursos y talleres y otros archivos propios de nuestros años de trabajo. Pero reordenar lo perdido sería algo casi innimaginable.
Lamentamos si ésto provoca algún inconveniente. De nuestra parte, seguiremos brindando el mismo servicio de excelencia que siempre, pero nos comunicaremos directamente por los blogs y ya no enviaremos cadenas de mensajes mensuales ni promociones algunas porque se ha complicado este tipo de acciones en la web.
Internet es un medio maravilloso de trabajo, comunicación e interacción. Pero hay que convivir con personas que no sabemos si por maldad, idiotez o enfermedad, se ocupan de destruir en lugar de construir.
Gracias a todos por entendernos y seguimos en contacto !!!

"Epidemia oculta": cada vez hay más consultas por las obsesiones

Gisele Sousa Dias escribió para Clarín un interesante artículo sobre TOC que se los copiamos:

Mucha gente tiene vergüenza de contarlas, pero está creciendo el pedido de ayuda. Unas 800 mil personas padecen de Trastorno Obsesivo Compulsivo en la Argentina. Para los médicos se trata de una de las patologías más inhabilitantes.

Quien haya visto "Mejor, imposible", la película con Jack Nicholson, conocerá una versión moderada de un obsesivo compulsivo. Para contener sus desbordes de ansiedad, Melvin repite rituales: apaga y prende la luz una, dos... cinco veces; tira el jabón cada vez que se lava las manos; lleva cubiertos de plástico al restaurante; enloquece cuando camina porque no "puede" pisar las uniones de las baldosas.
En la vida real, cada vez se diagnostican más casos de Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC): "Esclavos de sus pensamientos", los llaman los psiquiatras. Conviven con ellos casi 800 mil argentinos, por eso hablan de una "epidemia oculta".
"El trastorno obsesivo compulsivo se caracteriza por la irrupción de pensamientos incontrolables (obsesiones) que provocan mucha ansiedad. Para neutralizar esas ideas y disminuir el malestar que generan, la persona ejecuta ciertas conductas repetitivas (compulsiones) que cumple como rituales", explica el psiquiatra Enzo Cascardo, coautor del libro "Trastorno obsesivo compulsivo y su espectro".
Entre los obsesivos más frecuentes están los "lavadores y limpiadores", que como sienten que pueden contaminarse se lavan repetidamente las manos; los "ordenadores", que sienten la necesidad de ordenar según pautas rígidas, y los "verificadores", que sienten que deben inspeccionar todo para evitar una catástrofe.
Los más graves son los TOC "con ideas mágicas", que lo tienen quienes se atan a cábalas como un conjuro para evitar tragedias.
"Tenía un paciente que sólo podía tomar el colectivo si antes pasaban el 10, el 60 y el 39, en ese orden; si no, sentía que algo terrible iba a pasar", cuenta Cascardo.
Y están quienes tienen ideas obsesivas ligadas a la muerte: "Tenía un paciente que no podía subirse al 17 porque venía de Recoleta y lo asociaba al cementerio", dice Gustavo Bustamante, de Fobia Club.
Aunque en menor o mayor medida todos nos identificamos con alguna de estas conductas, no siempre son para preocuparse: para que sea un trastorno, el ritual tiene que ocupar al menos 1 hora por día.
Si un chico, por ejemplo, llena ollas con agua para evitar un incendio y con el tiempo deja de hacerlo, quiere decir que se procesó como un miedo normal.
La psiquiatra Graciela Peyrú, presidenta de la Fundación Argentina de Salud Mental, dice que cada vez atienden más casos: "Los trastornos de ansiedad están aumentando en el país por el ritmo en el que vivimos y la inseguridad social que nos genera, por ejemplo, la amenaza latente de desempleo. Para tener un TOC hay que estar inmerso en estas condiciones sociales y además tener predisposición biológica y una cierta historia individual, como haber vivido situaciones traumáticas".
Los médicos lo ubican entre las patologías más inhabilitantes: "El trastorno tiende a agravarse porque la angustia no se procesa y los diques para contenerla empiezan a reforzarse. Así, la persona arranca verificando hornallas y termina sin poder salir hasta que las ventanas no están en un ángulo determinado", dice el psicoanalista Pedro Horvat. "Toda la vida social queda condicionada. Había un paciente que en su trabajo llenaba un formulario en el tiempo en que los otros llenaban 20 porque volvía a revisarlos. Engañaba a los de seguridad para que lo dejaran entrar los fines de semana para volver a verificar. Otros, en cambio, terminan perdiendo el trabajo porque viven cumpliendo rituales y llegan siempre tarde", dice Bustamante, A la familia, la tiraniza: "La sexualidad queda limitada: la sensación de contagio inminente hace que usen hasta cuatro preservativos juntos aunque tengan pareja estable".
Los psicofármacos y la psicoterapia ayudan a salir del infierno, pero el diagnóstico llega entre los 25 y los 35 años: tarde, por la vergüenza y por el temor de cargar con el estigma de la locura.

Según un informe de la Sedronar: La marihuana es cada vez más tóxica

La marihuana que se vende y consume ilegalmente en la actualidad en la Argentina es más tóxica, adictiva y peligrosa que antes, por modificaciones genéticas realizadas por los narcotraficantes, según un informe del gobierno, difundido ayer por la agencia DyN.
El secretario de Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar), José Granero, calificó de "mito" que esa sustancia no fuera tóxica, debido a que "es una droga con principios psicoactivos muy potentes, que impactan sobre el sistema nervioso central, el cerebro y el aparato cardiovascular. La marihuana no es una droga blanda; es una mentira que se está instalando", dijo el funcionario, en sintonía con el gobierno chileno.
La marihuana fue una de las más mencionadas en una lista de sustancias cuya tenencia no debería ser penalizada, según el debate abierto por el ministro de Justicia, Aníbal Fernández, como parte de una reforma integral a la denominada ley de drogas para descriminalizar a los adictos.
Esa droga, según un estudio de la Sedronar, es la primera sustancia psicoactiva ilegal más consumida en el país: más de 2,75 millones de personas, de entre 12 y 65 años, alguna vez la probaron, según sostiene esa dependencia, en franca oposición a lo que opina Fernández.

Recaidas en adicciones

Ayer Clarín publicó un artículo donde se hablaba de la reincidencia en el consumo de drogas por parte de la mayoría de los adictos después de un tratamiento.
Las recaidas son parte del proceso. Pero son un duro trance. Dejar una adicción no es fácil, pero tampoco imposible. Lo importante es saber que causa la adicción y querer salir de ella.
Nos pareció interesante este punto: Radiografía del consumidor en recuperación

Joven, varón y policonsumidor.
Es el perfil del adicto promedio que recibe asistencia en alguno de los 82 centros de rehabilitación subvencionados por Sedronar.
El 68,6% de los que están en tratamiento es policonsumidor.
"Suelen consumir entre dos y tres drogas. Cuanto más jóvenes, más cantidad de drogas mezclan" (Observatorio de Drogas).
Los adictos en tratamiento son principalmente jóvenes: la mitad tiene menos de 24 años.
El 84% son varones.
Pero la tendencia indica que hay cada vez más mujeres, y que son también policonsumidoras.
"La celeridad en el consumo de varias drogas es mayor: es decir, en menos tiempo los pacientes consumen una mayor cantidad de drogas. Esto refleja mayor severidad en los patrones de uso" (Lic. Graciela Ahumada, investigadora del Observatorio).
La principal droga que motiva el tratamiento es el alcohol (33%).
Lo siguen la marihuana (23%), la cocaína (21%) y la pasta base (8%).
En los últimos años creció la demanda de tratamiento por abuso con esta última sustancia, también llamada "paco".
Seis de cada diez adictos que inician un tratamiento se rehabilita, pero más de la mitad vuelve a consumir alguna vez. "Eso no significa que recaigan en el problema", aclara el licenciado José María Rshaid, de Casa del Sur. . "Un tratamiento puede durar entre 8 y 18 meses, y luego se debe seguir con cierto nivel de acompañamiento porque la adicción traiciona. Trabajar con una persona internada es fácil porque el paciente está aislado de la sustancia: la clave es trabajar con el afuera".

Adicciones en las Empresas

Esta semana, Clarín publicó esta noticia que compartimos con todos ustedes.
Les recordamos que Cre-In® cuenta con un Programa de Capacitación sobre Adicciones y Conductas Compulsivas para Empresas.
ACUERDO DEL GOBIERNO CON SINDICATOS Y PRIVADOS
Programa para prevenir adicciones en las empresas
Lo lanzarán hoy. Busca bajar el ausentismo y mejorar la prevención.
Empresas, sindicatos y el Estado lanzarán hoy el primer programa para prevenir adicciones desde el ámbito laboral. Será a las 19 en el Ministerio de Trabajo, en un encuentro entre representantes de la Unión Industrial Argentina (UIA), la Confederación General del Trabajo (CGT), y varias empresas multinacionales (como Novartis, Telefé, Alto Paraná, YPF y Repsol, entre otras) y diversos sindicatos médicos, con el objetivo de firmar el primer convenio laboral de prevención de las adicciones a sustancias psicoactivas. La iniciativa cuenta con el apoyo del Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos y su Comité Científico Asesor, y fue titulada "Invertir en el mejoramiento de la calidad de vida de los trabajadores es impostergable". Las adicciones son una preocupación frecuente en las áreas de Recursos Humanos de las empresas y también trepan posiciones en la agenda oficial. Según las estadísticas de las compañías, las ausencias, las licencias por enfermedad y los accidentes laborales hacen estragos en los números. Está probado que invertir esfuerzos en su prevención y tratamiento redundan beneficios. Desde el punto de vista del Estado, la prevención baja el gasto en atención médica. Cifras del Ministerio de Salud también subrayan la fuerte incidencia de los accidentes domésticos y laborales entre las principales causas de mortalidad en el país.A su vez, la Encuesta Nacional de Prevalencia de Consumos, presentada por el ministro Aníbal Fernández, reveló que el alcohol y el tabaco constituyen casi el 80% de los casos de uso, abuso y adicciones, seguido por el amplio consumo de sustancias farmacológicas y de venta libre. Recién después, según afirma el Ministro, los siguen las drogas ilegales. Según las fuentes oficiales, "el convenio marca una ruptura en el paradigma actual del derecho laboral en las adicciones". El convenio establece que las distintas partes, "en el ámbito de sus respectivas competencias, convienen en cooperar y asistirse a fin de establecer medidas de prevención y tratamiento de las adicciones dentro del ámbito laboral, a través de diversos programas de capacitación". Las empresas se comprometen a permitir al Estado "poner a prueba durante un período corto, planificado, un diseño de prevención realizado por un comité científico asesor, que será especialmente diseñado para cada sector y región". El Comité , por su parte, brindará el soporte científico para los programas técnicos de capacitación en materia la prevención y el tratamiento.